viernes, 3 de febrero de 2012

En tu día especial.


Le pedí a un colibrí
que me diga a qué saben las flores.
A su piel porque es la más suave, me dijo.

Le pregunté a una abeja
qué puede ser más dulce que su miel.
Sus ojos, me contestó, porque sus lágrimas lo son.

Detuve el vuelo de una mariposa
para que me dijera quién tiene alas más bonitas.
Ella, me confesó, porque son las de un ángel.

Quise saber del sol
a quién iluminaría en este día especial.
A la que más e iluminado durante 42 abriles, fue su respuesta.

Le dije a la luna
que me contara su plan para esta noche.
Entraré por su ventana, me contó, para vestirla de plateado.

Le rogué a una paloma
que surcara los cielos con un mensaje.
Allá voy, me dijo, le susurraré al oído cuanto la sueñas.