sábado, 2 de mayo de 2009

Anecdotita alcohólica.

En los 90, los que nos gobernaban, decían que estábamos en el primer mundo. Equiparando para lograr eso nuestro empobrecido peso con el dólar; todos lo recuerdan. Nos creíamos los reyes del mambo. Entonces qué hacíamos; cambiábamos el auto cada dos o tres años, nos comprábamos todo aquello que nos acercara a ese mundo número 1 y, nos íbamos de viaje en nuestras vacaciones, bien lejos. Yo lo hice. Le dije un día a mi familia acostumbrada a veranear en Villa Gessel: Nos vamos a México. Y antes de que salieran de su asombro, nos subimos a un avión. Cuando llegamos a Cancún, volví a hablar. Les dije: Esto, no es México. O por lo menos no era el que yo quería conocer. Pero ya que estábamos "en el primer mundo" la consigna fue: pasarla bien. 
Resulta que nos instalamos en un hotel "All inclusive", con todo para comer, todo para tomar, sin parar, sin recáudos económicos (todo había sido pagado por mi en Buenos Aires) pero, a pesar de ello, yo, porque soy un tipo medido, no me descontrolé, si no hubiera vuelto por tierra y rodando de vuelta de esas vacaciones. Eso si, mi copa de vino en la cena me la tomaba todas las noches; claro que no se asemejaba a un buen tinto de Mendoza, o chileno, pero era algo que los mexicanos, buena gente de verdad, llamaban vino. 
En esos hoteles turísticos caribeños, más de uno de ustedes lo sabrá, siempre después de la cena, en un gran salón con escenario que nunca falta, se ofrecía algún espectáculo teatral, un poco improvisado supongo, o musical, como para ir bajando la comida. Los actores, músicos y demás, eran los mismos que nos servían el desayuno, el almuerzo, la cena, animaban con juegos y gimnasia a los viajeros en la piscina durante el día, (juro que jamás participe de eso) y además hablaban todos los idiomas. En definitiva, jamás dormían; llegué a pensar que eran robots. Entre esos robots, había una joven que estoy completamente seguro era de carne y hueso. Una belleza increíble. Verónica, jamás olvidaré su nombre. No muy alta, de piel mate con un color que no se si era real o pintado por el sol, super simpática, muy sensual, y con un cuerpo tallado por los dioses. Un sueño.
Una noche, después de la cena con vinito mexicano y de haber disfrutado del teatro, me acerqué a el bar y pedí una Margarita. Nunca tomaba nada fuera de la cena, pero esa noche, creo estaba signada para mi, no sé... algo flotaba en el aire. Sólo una tomé, créanme, la cuestión es que ese solo trago me hizo un "click" en la cabeza dificil de explicar, aunque trataré: Toqué el cielo con las manos, me sentí el tipo más feliz del mundo, me dieron ganas de besar al barman por haberle puesto quién sabe qué para que me sintiera tan bien. Mi boca cruzaba toda mi cara de este a oeste. ¡Hablé inmediatamente con los dioses! Y me concedieron mi deseo. Una diosa de pronto se presentó en el bar delante de todos los que estábamos allí: Verónica. Vestida para desvestirla con los dientes. Bellísima. Habló: Ahora voy a ir a bailar a una disco, dijo, ¿quién quiere venir conmigo? No lo dudé ni un segundo, la Margarita alojada en mi estómago, hizo que superara inmediatamente mi timidez y levanté la mano derecha gritando: ¡Yo voy! 
Sentí apoyarse una mano en mi hombro... derecha también, pequeña y suave, pero con todo el peso de la ley, y una voz conocida por mi después de años de convivencia me preguntó casi con amabilidad: ¿Adónde creés que vas, boludo?
Cinco minutos después, en mi cama de ese hotel nosecuantasestrellas, soñaba con una mujer de ébano salir del mar turquesa cristalino, sacudiendo su pelo negro azabache, desparramando miles de diamantitos que se transformaban en gotitas que recorrían su inmaculada piel morena, metiéndose sin piedad en mis cinco sentidos y, empapada de luz mezclada con sal, corría hacía mi con los brazos extendidos. Fue un maravilloso ensueño sólo empañado por no haber conocido nunca la noche cancunreña.

2 comentarios:

  1. jujuju!!! muy lindo y fresco. Me encantó eso de metiéndose sin piedad en mis cinco sentidos. Beso.
    M

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  2. Se te puso negra la noche!!!

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